El DS Nº
029-2018-PCM, del 19 de marzo de 2018, en la primera disposición complementaria
transitoria, establece que:
De
la aprobación de la Política General de Gobierno para el presente periodo
gubernamental
La Política
General de Gobierno para el presente periodo de gobierno aprobada por acuerdo
del Consejo de Ministros, se materializa por Decreto Supremo con el refrendo de
el/la Presidente/a del Consejo de Ministros, a los diez (10) días hábiles de
entrada en vigencia de la presente norma.
¿Cuál es la
política general del presente gobierno para el sector pesquero en relación al
reciente Decreto Supremo mencionado en el párrafo anterior?
El Plan
Estratégico Sectorial Multianual del Ministerio de la Producción, aprobado con
la RM 354-2017-PRODUCE del 25 de julio de 2017 no contempla mayores cambios ni
reformas estructurales en el sector pesquero. El Plan Operativo Institucional
del mismo Ministerio, aprobado con la RM 356-2017-PRODUCE del 26 de julio de
2017, tampoco ofrece cambios significativos de fondo en la administración de la
pesquería nacional. Lo cual es una lógica consecuencia de la ausencia de una
agenda o proyecto de políticas de Estado para la pesca del actual régimen, que
sugiera reformas de fondo.
La
definición de objetivos estratégicos y su inclusión en un plan de gobierno o
política de gobierno o de Estado, es una declaración de intenciones. En
términos prácticos, los cambios o reformas estructurales se activan únicamente
a través de los instrumentos de gestión apropiados, los cuales son una ley,
decreto supremo, resolución suprema o resolución ministerial. Mientras una
política o un objetivo estratégico no aterricen en cualquiera de estos
documentos de gestión, no dejaría de ser una declaración lírica que muestra
voluntad política; pero no evidencia una decisión política con efectos reales.
Es necesario prestar atención a lo
que significa administrar la explotación de los recursos pesqueros y establecer
la tributación justa para garantizar una adecuada participación de la sociedad
en la renta proveniente de esos recursos naturales, sin perjudicar la
rentabilidad de las empresas o pescadores.
El control y la explotación de
nuestros recursos naturales renovables y no renovables, merecen replantearse
con el objeto de que el Estado participe de los beneficios económicos de su
explotación en mejores términos, entre otras reformas de fondo.
Si aspiramos
a la soberanía y seguridad alimentarias se necesita una pesquería que produzca,
en primer lugar, alimentos variados, sanos y accesibles para su población y, en
segundo lugar, para las oportunidades del mercado externo. La pesquería sigue
siendo conceptuada como fuente de riqueza vía exportación, negándonos a aceptar
que primero debe ser fuente de alimentación nacional y luego ser usada como
arma estratégica de negociaciones en un mundo que poco a poco se verá más
inundado por el hambre.
El interés
nacional, entendido como la defensa del bien común, impone políticas que puedan
cuidar los recursos pesqueros para las generaciones futuras y que le den a la
sociedad una adecuada participación en las ganancias que obtienen quienes se
ven beneficiados por una concesión de explotación de un bien común patrimonio
de toda la nación y alimentos baratos para toda la población del país en forma
prioritaria.
La protección de nuestros recursos
solo pueden materializarse a partir de la existencia de un poder político que
establezca planes de largo plazo y optimice el funcionamiento del aparato
estatal.
Los procesos
de implementación de objetivos estratégicos, en términos generales, están
debidamente normados y podrían parecer complicados; pero no empiezan a
activarse sin la existencia de la voluntad política expresada en una Política
de Estado o de Gobierno. Para que esto tenga éxito y se puedan alcanzar metas
en un período de gobierno, se requiere de gran capacidad de síntesis de la
problemática pesquera y las acciones propuestas.
Mucha reforma
terminaría en inaplicable. Poca reforma tiene probabilidad de éxito en la
medida que el tiempo sea suficiente y no haya detenciones debidas a la
oposición de algunos administrados o subsectores, por lo cual debe establecerse
consensos previos.
Lo ideal es
que los subsiguientes gobiernos continúen la misma línea y la perfeccionen a
fin de tener un gran diseño de largo plazo para una pesquería sostenible,
inclusive y que privilegie la alimentación nacional.
Sin embargo,
ningún cambio ni mejora alguna serán posibles mientras no se establezcan un
mínimo de objetivos estratégicos debidamente consensuados y luego
apropiadamente convertidos en documentos de gestión que presenten acciones y
actividades concretas, susceptibles de ser medidas a través de indicadores.
El DS Nº
029-2018-PCM aprueba el Reglamento que regula las Políticas Nacionales y
establece las siguientes definiciones:
Artículo
5.- Políticas de alcance nacional
Son políticas de
alcance nacional, aplicables en todo el territorio, las Políticas de Estado y
las Políticas Nacionales.
Artículo
6.- Políticas de Estado
6.1 Las políticas
de Estado definen lineamientos generales que orientan el accionar del Estado en
el largo plazo a fin de lograr el bienestar de los ciudadanos y el desarrollo
sostenible del país. Son el resultado de un consenso alcanzado en el Foro del
Acuerdo Nacional.
6.2 Están
contenidas en el Acuerdo Nacional y se concretan en el Plan Estratégico de
Desarrollo Nacional.
6.3 La Presidencia
del Consejo de Ministros a través del Centro Nacional de Planeamiento
Estratégico - CEPLAN facilita el seguimiento a las políticas de Estado.
Artículo
7.- Política General de Gobierno
7.1 La Política
General de Gobierno es el conjunto de políticas priorizadas que se desarrollan
a través de políticas nacionales durante un periodo de Gobierno.
7.2 Está bajo la
dirección del Presidente de la República y debe ser presentada por el/la
Presidente/a del Consejo de Ministros al Congreso de la República, conforme lo
dispuesto en la Constitución Política del Perú.
7.3 El/la
Presidente/a del Consejo de Ministros apoya al Presidente de la República en la
gestión de la Política General de Gobierno mediante la coordinación,
seguimiento al cumplimiento y evaluación de las políticas priorizadas.
7.4 A los cuarenta
(40) días de haber asumido sus funciones el Presidente de la República, y por
iniciativa de este, el Consejo de Ministros aprueba mediante acuerdo la
Política General de Gobierno, en el marco de las Políticas de Estado, los
objetivos del Plan Estratégico de Desarrollo Nacional y las políticas
nacionales vigentes. Dicha Política General se materializa mediante Decreto
Supremo refrendado por el/la Presidente/a del Consejo de Ministros.
7.5 Los
ministerios competentes proponen la aprobación o actualización de las políticas
nacionales que conforman la Política General de Gobierno bajo su competencia,
conforme la estructura contenida en el Anexo 1, en un plazo máximo de ochenta
(80) días calendario de publicado el Decreto Supremo a que se hace referencia
en el numeral 7.4 que antecede.
7.6 En caso una
política priorizada de gobierno ya contara con una política nacional aprobada
que trasciende el periodo de gobierno en curso, deberá ser actualizada, de
corresponder, sujetándose al plazo señalado en el numeral 7.5.
7.7 El seguimiento
a las metas que se prioricen en la Política General de Gobierno está a cargo de
la Oficina de Cumplimiento de Gobierno e Innovación Sectorial de la Presidencia
del Consejo de Ministros.
Artículo
8.- Políticas nacionales
8.1 Constituyen
decisiones de política a través de las cuales se prioriza un conjunto de
objetivos y acciones para resolver un determinado problema público de alcance
nacional y sectorial o multisectorial en un periodo de tiempo.
8.2 Definen los
objetivos prioritarios, los lineamientos, los contenidos principales de las
políticas públicas, los estándares nacionales de cumplimiento y la provisión de
servicios que deben ser alcanzados y supervisados para asegurar el normal
desarrollo de las actividades públicas y privadas. Para tal efecto, toda
política nacional se debe formular conforme al contenido del anexo 1.
8.3 Su diseño y
evaluación son de competencia exclusiva de los Ministerios para cada uno del o
los sectores a su cargo, pudiendo tener continuidad más allá de un determinado
gobierno.
8.4 Los
ministerios tienen a cargo la coordinación de sus políticas nacionales,
contando con el apoyo de la Presidencia del Consejo de Ministros para la
coordinación de su formulación y seguimiento, en lo que resulte pertinente.
8.5 Se enmarcan en
las Políticas de Estado, la Política General de Gobierno y los objetivos del
Plan Estratégico de Desarrollo Nacional y pueden ser:
- Políticas
nacionales sectoriales, corresponden al subconjunto de políticas nacionales
acotadas a una determinada actividad económica y social específica pública o
privada, bajo el ámbito de competencia de un Ministerio.
- Las políticas
nacionales multisectoriales, corresponden al subconjunto de políticas
nacionales que buscan atender un problema o necesidad que requiere para su
atención integral la intervención articulada de más de un sector, bajo el
ámbito de competencia de dos o más Ministerios.
Artículo
9.- Concordancia de las políticas regionales y locales con las políticas
nacionales
Los gobiernos
regionales y locales formulan políticas regionales y locales, en sus
respectivos ámbitos territoriales, en concordancia con las políticas nacionales
conforme a lo dispuesto en sus respectivas Leyes Orgánicas.
Artículo 11.-
Vinculación de las políticas nacionales con el SINAPLAN
11.1 Las políticas
nacionales desarrollan sus objetivos a través de metas, indicadores y
responsables en los respectivos planes estratégicos sectoriales
multianuales-PESEM, planes estratégicos multisectoriales, planes estratégicos
institucionales y planes operativos institucionales de los Ministerios y sus
organismos públicos, según corresponda, en el marco del Sistema Nacional de
Planeamiento Estratégico - SINAPLAN.
11.2 Las políticas
nacionales no requieren la elaboración de planes de implementación o ejecución
distintos a los establecidos en el Sistema Nacional de Planeamiento Estratégico
- SINAPLAN.
11.3 A nivel
territorial, las políticas nacionales se vinculan con los Planes de Desarrollo
Concertado y con los planes institucionales (Plan Estratégico Institucional y
Plan Operativo Institucional) de los gobiernos regionales y locales, en el
marco del Sistema Nacional de Planeamiento Estratégico - SINAPLAN.
Marcos
Kisner Bueno
Presidente
de la Revista Pesca