El canon pesquero se crea
recién en 2003.
Las cifras de las
transferencias del ejercicio 2013 muestran la inequidad en la participación de
la renta económica. Las municipalidades reciben sumas que pueden calificar de
ofensivas o de burla, lo que evidencia la mala estructuración de los índices de
distribución del canon, así como la escasa participación de la Nación en la
pesca.
El caso de las
Municipalidades resulta patético, como ilustran las muestras representativas de
las diez que reciben más y menores ingresos. Frente a esta
realidad, la agenda que impone la industria está concentrada en sus privilegios
sobre las 10 millas. El Estado está concentrado en defender su tesis.
¿Quién defiende a la
Nación?
Aunque parezca increíble,
existe una Municipalidad que recibe 3 soles por canon pesquero procedente de
los derechos de pesca. Y otra que recibe 1,069 soles por canon pesquero
procedente del impuesto a la renta del sector.
La Municipalidad de
Ventanilla es la que más recibe por canon de derechos de pesca: 1 millón trece
mil soles y 6 millones y medio por canon de impuesto a la renta.
La agenda sectorial no
menciona estas inequidades. Solo está centrada en los derechos a la extracción
en las diez millas que reclama la industria.
No hay agenda para la
contaminación ni para la mejora de la recaudación por derechos de pesca e
impuesto a la renta. Tampoco hay agenda para darle al mercado interno igualdad
de condiciones de competitividad que a la exportación.