Las exportaciones pesqueras peruanas constituyen un argumento impactante promocionado por todas las autoridades en todos los medios, Promperú documenta muy bien las cifras, algunas de las cuales reproducimos en esta edición. Ese es el Perú de las cifras oficiales, del mito del crecimiento y de la tragedia de la abundancia. Las cifras del sector privado 2010 no se ven reflejadas en el sector pesquero como se aprecia en su presupuesto, que también presentamos en esta edición.
Ningún medio muestra en cifras y en el mismo nivel de difusión y con el mismo triunfalismo, cuál es el impacto que ese crecimiento ha tenido en la Nación y en la Sociedad peruana. Tampoco muestra ni analiza el comportamiento de la autoridad sectorial en términos de ejecución presupuestal y de eficiencia. El PRODUCE no exhibe en forma transparente qué destino le da al 50% de los derechos de pesca que recauda, ya que el otro 50% va al Canon Pesquero.
¿De qué le sirve entonces al país ser un gran exportador y que posee un sector pesquero en contínua expansión hacia las exportaciones, si eso no se traduce en bienestar, alimentación y modernidad para la sociedad peruana en su conjunto?
El nuevo gobierno debiera exponer al país cuál es la verdadera participación del sector y sus exportaciones para con el país, así como tomar las medidas correctivas que fuese necesario en beneficio del bienestar general.
El nuevo gobierno debiera desterrar el hábito de los titulares de pliego de usar el cargo para promocionarse a título personal con medidas aisladas efectistas y mediáticas, que no forman parte de una política general, integrada y coherente para administrar la pesquería peruana, sino más de agendas personalistas.
El nuevo gobierno necesita colocar personas eficientes, experimentadas y sin vinculación económica con el negocio pesquero, ni directa ni encubiertamente.
La Dirección de Infraestructura del FONDEPES deberá rendir cuentas a la Nación, en especial al sector pesquero artesanal, por su pobre y deficiente desempeño en la ejecución de proyectos de inversión en beneficio de la pesca artesanal, que se evidencia en su ejecución presupuestal.
Los actos de corrupción denunciados y en proceso de investigación en dicha Dirección, deben ser culminados y hechos públicos.