El FONDEPES dio de baja a las
embarcaciones de entrenamiento pesquero Amauta I y Amauta II, las cuales estaban
en una condición de mantenimiento inaceptable, demostrando negligencia e
irresponsabilidad en su mantenimiento durante los últimos años. El País se dio
el lujo de dar de baja a dos embarcaciones escuela que fueron instrumentos de
la capacitación pesquera simplemente por la ignorancia y desidia de las
autoridades del FONDEPES de los últimos años. Nada se dice sobre si serán o no
reemplazadas. Simplemente se les echa a la basura sin responsabilidad alguna
para nadie.
Sin embargo, ambas
embarcaciones ya de baja, AMAUTA I y AMAUTA II, han sido donadas a la Asociación
Peruana de Acuicultura y Pesca quien se ha hecho acreedora de recibir, en
calidad de donación, dichas embarcaciones.
El problema no está en la
donación, la cual está correctamente efectuada, sino en los años que estas
embarcaciones fueron abandonadas por administraciones insensibles, desconocedoras
de la conservación de embarcaciones y desinteresadas e indolentes con la pesca
artesanal, que condujeron al lamentable estado que motivó su baja.
La Resolución N⁰ 000161/2023-FONDEPES/OGA
dice al pie de la letra:
Que, mediante Resolución N° 000092-2023-FONDEPES/OGA,
de fecha 31 de agosto de 2023, la Oficina General de Administración del Fondo
Nacional de Desarrollo Pesquero, aprobó la baja de dos (02) bienes
patrimoniales, por la causal de mantenimiento o reparación onerosa, autorizando
el retiro de los valores registrados en los libros contables de la entidad, el
mismo que fue publicado en el portal institucional de la entidad;
¿Cómo es que dos embarcaciones
dadas de baja por inservibles serán utilizadas por dicha Asociación? ¿Las
podrán reparar? ¿Son recuperables? Parece que sí, ya que de lo contrario no se
habría hecho la gestión de donación. Entonces ¿por qué la administración del
FONDEPES les dio de baja en lugar de recuperarlas mientras pudo?
Pareciera, que el sentimiento
de culpa del FONDEPES se confirma cuando la resolución de donación esconde los
detalles de los bienes donados, haciendo solo mención a la resolución la 092-2023,
que sí expresamente menciona a las embarcaciones Amauta I y Amauta II, como
objetos de la baja administrativa. ¿Querían que nadie se de cuenta para no ser
cuestionados?
¿Por qué tanto sigilo y
disimulo? ¿Por qué no hacer más transparentemente esta donación?
SE RESUELVE:
Artículo 1º.- APROBAR la transferencia en la modalidad
de donación de dos bienes muebles dados de baja por la causal de mantenimiento
o reparación onerosa, en favor de la Asociación Peruana de Acuicultura y Pesca,
por el valor total neto de S/ 1.00 (Un y 00/100 sol) por cada bien, cuya
descripción y características se encuentran detalladas en el Apéndice A que
forma parte integrante de la presente Resolución.
https://cdn.www.gob.pe/uploads/document/file/5177665/RESOLUCION-000092-2023-OGA.pdf
En este contexto, tal vez
ahora estén en mejores manos que las puedan repotenciar y convertirlas en
embarcaciones útiles, como puede hacer a la Asociación Peruana de Acuicultura y
Pesca. Eso no ocurría mientras estaban en manos de FONDEPES, entidad para la
cual la flota del ex CEP Paita no tiene utilidad ni importancia. La vergüenza
que esto significa para esta entidad pública, si se compara lo que fue el
Centro de Entrenamiento Pesquero de Paita, es algo que alguna vez deberá
generar sanciones para los funcionarios indolentes e indiferentes con el
patrimonio del estado.
Los responsables, al final, se
irán de la institución; pero no deberán ser olvidados, sino sancionados.
El 12 de setiembre de 2023
publicamos un artículo con un testimonio fotográfico del estado de
mantenimiento de estas embarcaciones, que puede leerse en el siguiente link:
https://revistapesca.blogspot.com/2023/09/fondepes-reduce-chatarra-dos.html
Sin embargo, el testimonio
quedó corto frente a la realidad.
Estas nuevas fotografías,
tomadas después de que las embarcaciones ya han sido recepcionadas por la
entidad a la que fueron donadas, permiten ver un estado de conservación
inaceptable. Muestran un nivel de deterioro tan grave, que amerita una
investigación por parte de los órganos de control. ¿Cómo es que una entidad del
Estado dedicada a servir a la pesca artesanal permitió que se llegue a este
nivel de deterioro?
Los responsables de haber dejado de darles mantenimiento deben ser sancionados, la contraloría debe iniciar una investigación al respecto. No se pueden permitir funcionarios que han dejado que patrimonio del Estado llegue a este nivel de deterioro.
Una verdadera lástima que causa una gran indignación, que solo podrá desaparecer el día en que los responsables, sobre todo los del más alto nivel, sean sancionados. La contraloría no puede ni debe permitir que esta desidia e irresponsabilidad quede sin sanción.
https://youtube.com/shorts/icNgusZMQIE?feature=share
https://youtube.com/shorts/PKS1HAOnHVE?feature=share