No creas en todo lo que se dice.

Aun cuando creas que algo aparece claro, ponlo en duda y no reposes. Duda de todo lo que parece ser bonito y verdadero. Pregúntate siempre: a «¿Para qué?». No creas que una cosa sola es buena; lo recto no es recto y tampoco lo curvado es curvado. Si alguien dice que un valor es absoluto, pregúntale en voz baja: «¿Por qué?». La verdad de hoy puede mentir ya mañana. Sigue el río desde donde comenzó el torrente. No te basten las piezas aisladas. Pregúntate siempre: «¿Desde cuándo?». Busca las causas, une y disuelve, atrévete a mirar tras las palabras. Si alguien dice: «Esto es bueno (o malo)», pregúntale en voz baja: «¿Para quién?» Friedrich Paulus

La debida gestión pesquera

El mayor fallo de la gestión es que ni los pescadores ni los gestores poseen los conocimientos necesarios para dirigir algo tan complejo como un ecosistema marino costero. El derecho a pescar no se debería basar en si uno dispone del dinero suficiente para comprarse un barco, sino en los conocimientos y la voluntad de trabajar en colaboración con los gestores y los científicos para hacer que la pesca sea sostenible. El derecho a pescar se debería ganar o perder según la voluntad de aceptar unos límites razonables a las capturas. Paul Greenberg.

REVISTA PESCA

La Revista Pesca es un medio de información alternativo que presenta artículos, opiniones y noticias referidas a la pesca en el Perú y el mundo, con énfasis en la política pesquera, la sostenibilidad de los recursos pesqueros y la seguridad alimentaria. En este blog se publican notas de importancia, así como novedades del sector pesquero.

En 2024 cumplimos 65 años de publicación en el Perú.

Las ediciones a partir del 2010 se publican en formato digital (PDF) en la siguiente página web: http://www.issuu.com/revistapesca/docs


Merecemos una gestión de la pesca con visión de país y compromiso con el ciudadano.

Los peces del Perú, primero para los peruanos


martes, 28 de septiembre de 2010

¿Contribuye la pesca a la seguridad alimentaria?

Tradicionalmente se ha considerado y algunos aún consideran al Perú como un país pesquero. A la luz de estas cifras, el término país pesquero no significa necesariamente que es un país que consume pescado. Significa que el Perú es un país que exporta pescado convertido en harina de pescado y pescado congelado y enlatado. Significa que el relativamente poco volumen de pescado para consumo humano directo que el país produce se destina a la exportación. Vale decir para la alimentación de otras poblaciones que no son la peruana. Significa que los productos hidrobiológicos solo son consumidos por una mínima fracción de la población peruana porque además de haber poca oferta, esta es cara, y la industria pesquera prefiere la exportación por los incentivos que tiene y porque es más sencillo vender productos a mercados ya existentes y debidamente articulados.

El mercado interno de productos hidrobiológicos no es atractivo y se concentra en Lima y las principales ciudades costeras. Vender en el mercado interno no genera Drawback ni devolución del IGV. Por tanto ¿porqué habría de ser atendido por la industria pesquera existente?

La necesidad de alimentación nacional no es incentivo para la industria privada. No deja de tener razón. Por ello es necesaria la intervención del Estado a fin de crear las condiciones y la articulación necesaria que permita el abastecimiento del mercado interno.

No es el Estado a través de programas ni de comisiones quien va a crear un negocio sostenible y rentable que asegure un abastecimiento contínuo y permanente al mercado interno.

Muchos programas y muchas comisiones se han formado y existen para promocionar el consumo de pescado; pero ninguna ha creado un mercado lo suficientemente atractivo para motivar a la empresa privada o a la creación de pequeños negocios dedicados a atender este mercado. La debilidad del Estado consiste en que las comisiones y los programas sociales no tienen la capacidad de estimular la inversión privada.

Lea la nota completa en el siguiente link:

sábado, 25 de septiembre de 2010

Datos imprecisos no contribuyen a tomar buenas decisiones

La administración y regulación de las pesquerías (con excepción de la anchoveta) se ha venido haciendo en base a hipótesis que ameritan ser confirmadas:

1. Cuantos son los administrados.
2. Cuantos recursos pesqueros existen.

Dos puntos elementales para poder ejercer una administración adecuada.

La información estadística del número de pescadores artesanales embarcados y no embarcados y del número de embarcaciones artesanales existentes (incluída la pesca continental) no solamente es imprecisa, sino que está desactualizada. La única información oficial a la fecha proviene de la II ENEPA realizada por el Imarpe en 2005. Y fue solo una encuesta. No fue un censo preciso y completo. ¿Cómo se puede administrar, regular y normar la actividad artesanal sin saber cuál es el tamaño de los administrados y su capacidad de realizar esfuerzo pesquero?

Los recursos pesqueros que la actividad artesanal extrae carecen de información técnica adecuada y no tienen límites de extracción.

Sin conocer el tamaño de las biomasas de cada recurso, lo que permitiría asignar límites máximos de extracción por período, y sin saber si el esfuerzo pesquero que puede aplicarse sobre ese recurso es adecuado, suficiente o excesivo, lo que ha venido haciéndose en el campo de la actividad artesanal es improvisado. Es preciso conocer cuánto existe, determinar cuánto se puede pescar y de allí determinar cuántos pescadores puede haber sin poner el riesgo no solo la sustentabilidad de los recursos, sino la estabilidad económica de los propios pescadores. Si hay demasiados pescadores para pocos recursos, ninguno podrá obtener ganancias adecuadas. El punto es que estas son cifras sobre las cuales no sabemos nada con la precisión necesaria.

Por eso es que se usan frases como el fomento o impulso a la actividad artesanal, orientando esa expresión a ser entendida como que se necesita más pescadores artesanales. Afirmar eso sería poco serio.

Para regular y mejorar la administración de la pesca artesanal y fomentar su tecnificación y capacitación, primero debe conocerse con precisión la situación real. El incremento del consumo de pescado se deriva de una administración seria, realista y responsable de los recursos pesqueros y de los agentes del sector.

El censo puede hacerse si diseña la meta presupuestal adecuada, que no sería significativa ni alarmaría al MEF; pero investigación no es posible sin recursos económicos adecuados, los que nos devuelve a un circulo vicioso en el cual la producción de datos científicos está atada a una situación presupuestal insuficiente.

La falta de información y conocimiento es evidente incluso en los medios de comunicación. Cuando se trata del sector Producción y de entrevistas a funcionarios del mismo, la mayor parte de preguntas e inquietudes se refieren a Industria y Pymes. Casi nada sobre pesca, lo que podría indicar que el medio carece de conocimiento o información adecuadas para generar preguntas o polémicas. De esta forma el sector pesquero siempre pasa desapercibido.

Los Desembarcaderos Pesqueros artesanales necesitan mejorarse, adecuarse a la norma sanitaria y modernizarse. Lo que no se ha hecho es valorizar el conjunto. Todos los DPAs, excepto los ya mejorados necesitan inversión. El primer paso lógico es tener la información adecuada, es decir el costo de inversión por cada uno de ellos. Si no se conoce esa información es poco serio decir que se va a conseguir financiamiento o se va a presupuestar en los próximos 5 o 10 años. Una cifra total precisa permite conseguir la fuente de financiamiento, bien sea de Recursos Ordinarios, Recursos Directamente Recaudados, donaciones o cooperación.

Todos los desembarcaderos podrían ser mejorados en uno o dos años trabajando simultáneamente en cada uno de ellos. Para eso primero debe determinarse el monto de la inversión total, de lo contrario no es posible siquiera ubicar la fuente de financiamiento. No es aceptable presumir que el trabajo se haría en plazos largos. Siendo el tema de fondo el origen de fondos, primero debería saberse de qué cifra se habla. Se consigue financiamiento y se diseña un mecanismo de trabajo ágil y eficiente que garantice su conclusión en plazos razonables.

LA MECANICA PRESUPUESTAL

Los pliegos presentan sus presupuestos en Junio de cada año a fin de que en el segundo semestre el Congreso finalmente apruebe el Presupuesto General de la República. Eso significa que el nuevo gobierno asumirá funciones con un presupuesto ya formulado y en vías de aprobación para el 2012. Lo que significa que recién para el 2013 podría contar con un presupuesto íntegramente formulado por su propia gestión.

Dadas las urgencias de la pesquería, los partidos en contienda electoral deberían tener estructurados planes de gobierno para el sector que puedan ser puestos en marcha apenas asuma el gobierno el ganador. Dado que la transferencia realmente empieza cuando se conocen los resultados en abril, el 28 de Julio podría haberse estructurado un presupuesto para el 2012, relativamente coordinado y consensuado. Pero la verdad es que recién el 2013, a mitad de gobierno existiría un presupuesto propio.

En la suposición de que exista voluntad y decisión políticas para diseñar y ejecutar una política pesquera, esta debería estar lista en tiempos adecuados para que indiquen las metas presupuestales a alcanzar.

En un escenario ideal, con espíritu de país, las fuerzas políticas en competencia hoy, podrían en consenso, elaborar una política pesquera. Esto facilitaría implementarla, gane quien gane.

El asunto es que la pesquería requiere atención especial por cuanto el cambio climático está impactando con rapidez. Si no se empieza a tomar medidas pronto, podría ser demasiado tarde.

jueves, 23 de septiembre de 2010

¿Dónde comprar anchoveta?

Los esfuerzos de creación del hábito de consumo de anchoveta empezados hace varios años, vienen teniendo un notable éxito, que se ven reforzados desde la primera Semana de la Anchoveta promocionada por Patricia Majluf y que encuentra una importante continuación en eventos como Mistura y en la oferta gastronómica peruana.

Mucha gente hoy empieza a apreciar la anchoveta y a consumirla. En la zona altoandina de Piura, el esfuerzo de 3 años de trabajo del Centro de Entrenamiento Pesquero con la Agencia Japonesa de Cooperación Internacional evidencia éxitos importantes.

La población está empezando a consumir anchoveta y esta demanda podría ser mayor y más rápida salvo por un detalle: ¿dónde comprar anchoveta?

Es en este aspecto que la labor del Despacho Viceministerial de Pesquería debe incidir. No hay suficiente oferta de anchoveta. Hay una demanda creciente pero no hay oferta. Solo se encuentra anchoveta en lata en algunos supermercados, la que  no es accesible a la población de menores ingresos y además no permite ser utilizada para preparar recetas diversas. También se encuentra la anchoveta congelada en supermercados; pero no se encuentra en estado fresco.

Lamentablemente el DS 010-2010-PRODUCE que aprueba un Reglamento de Ordenamiento de la anchoveta para Consumo Humano Directo, contradice los esfuerzos de promoción al bloquear las posibilidades de desembarque de anchoveta para los mercados en estado fresco.

El esfuerzo de promoción debe ser complementado orientando mayor esfuerzo a la creación de microempresas dedicadas a la transformación y comercialización de anchoveta. El Centro de Entrenamiento Pesquero de Paita, comprometido en esta actividad en un proyecto que está en su último año de ejecución, merece ser potenciado a fin de que incremente sus esfuerzos por capacitar en las buenas prácticas de manejo de la anchoveta a bordo, en el procesamiento de la misma en su presentación de saladita, en la conformación de microempresas, y en el manejo de aspectos de comercialización y costos a fin de que cubran la demanda de las poblaciones que ya tienen un buen nivel de hábito de consumo. Este tipo de proyectos pueden ser replicados a lo largo del país, agregando las innovaciones convenientes que permitan que este nuevo mercado que se está creando encuentre quien satisfaga la demanda.

Crear el hábito de consumo y el mercado es un proyecto de largo plazo que tiene que mantenerse, crecer y ser debidamente potenciado entendiendo que se debe trabajar simultáneamente en la difusión y en la creación de mercados, así como en articular y estimular la creación de pequeños negocios que hallen su propio espacio en este nicho de mercado. Las posibilidades de generación de empleo e incremento de la oferta de anchoveta están en su mejor momento si el Estado adopta las decisiones adecuadas y explota la experiencia adquirida hasta el momento.

Los volúmenes iniciales de la demanda pueden no ser lo suficentemente grandes como para que sean atractivos para las medianas y grandes empresas, pero sí pueden encontrar receptividad en micro empresas, en la medida que se enfrente el escenario con creatividad e imaginación.

martes, 21 de septiembre de 2010

El Perú necesita una flota de altura

A lo largo de los últimos 15 años el Perú no ha dispuesto de una flota de altura para la captura de túnidos, ni de jurel. El país es un testigo lejano de las capturas de especies transzonales y altamente migratorias como las indicadas. La inversión privada en este negocio, asegura para el Estado Peruano, la creación de una flota de altura que participará en la explotación del jurel en aguas internacionales, obteniendo beneficios para el país.


Actualmente hay tímidos intentos de unos cuantos barcos por incursionar en la actividad. Se necesita una flota y no solo unos barcos. Encontrar el cardumen se facilita cuando son varios barcos trabajando en equipo en la operación de búsqueda. Las experiencias del Bjornoy evidencian que un barco solo tiene limitaciones.

Las características técnicas del barco deben tenerse en cuenta considerando que la potencia del motor debe permitir arrastrar a una velocidad de entre 5 a 6 nudos, dada la velocidad de desplazamiento del jurel. Un arrastre a menos de 4.5 nudos sencillamente facilita que el cardumen salga de la red.

El bunker y el espacio de maniobra en cubierta deben ser suficientes.

La tripulación debe ser experta. Una tripulación cerquera dispone de una experiencia diferente a la de una tripulación arrastrera.

El Perú poco a poco se va quedando con menos gente experimentada en el arrastre de media agua. Las experiencias con las flotas extranjeras y Flopesca creó una generación de capitanes y tripulantes con un expertisse muy bueno. La inexistencia de una flota actual obligó a esa gente a emigrar en busca de oportunidades a otras latitudes como Africa por ejemplo.

Mientras más tiempo el sector privado se demore en invertir en una flota, las posibilidades de no encontrar tripulaciones experimentadas aumentan.

Lea el artículo completo en el siguiente link:

http://www.revistapescaperu.com/index.php/miscelaneos

viernes, 17 de septiembre de 2010

INVERSION EN EL SECTOR PESQUERO EN EXTRACCION Y TRANSFORMACION

El cuadro estadístico que acompaña a esta nota muestra la evolución de los principales recursos pesqueros en los últimos 50 años, de acuerdo a la información oficial, accesible a todo el público en los portales de Produce e Imarpe.

Lo que esta información no muestra es el tamaño de la biomasa de cada recurso, dato que es interesante conocer también.

Desde el punto de vista del análisis para invertir en las áreas de extracción y transformación es determinante contar con buena información científica a fin de determinar el grado de incertidumbre o riesgo y cuáles podrían ser las especies objetivo susceptible de mayor esfuerzo pesquero.

La pesca es aleatoria y discontinua en esencia, debido al alto grado de dependencia de los recursos provenientes de los cambios oceanográficos y de la actividad antropogénica. Hoy en día las implicancias del cambio climático se suma a la incertidumbre en forma más evidente.

Las especies hidrobiológicas son sumamente sensibles a los cambios de temperatura del mar y pueden forzarlas a movimientos migratorios en busca de la temperatura que requieren.

Por tanto, ante la insuficiencia de datos que permitan un análisis sobre el factor de riesgo y de incertidumbre, es probable que invertir en el sector de extracción, del cual derivan las actividades de transformación, no sea atractivo.

Las cifras muestran que solo la pota y la anchoveta concentran prácticamente la principal atención de la actividad sectorial. Sobre el resto de especies no existen, por lo menos en forma abierta y visible, información sobre los volúmenes de biomasa existente ni sobre los límites de captura de las mismas que permitan asegurar sostenibilidad de los recursos y por consiguiente de la extracción. El término “otros”, por el volumen que representa, debería tener un mejor nivel de detalle para conocer de qué recursos de trata.

En este escenario el término de fomento a la pesca, en especial a la artesanal, no debiera entenderse como aumentar la cantidad de pescadores, sino al incremento de la capacidad tecnológica, capacitación y mejoramiento de los desembarcaderos pesqueros artesanales. Ante la ausencia de información científica se debe imponer el enfoque precautorio sobre los volúmenes de desembarque de todos los recursos pesqueros.

Es prioritario que el ente científico disponga de mayores recursos para realizar investigación sobre todos los recursos hidrobiológicos y que los resultados sean hechos públicos y estén fácilmente a disposición de la autoridad administrativa de pesquería, del sector y de los posibles inversionistas.

Sin este tipo de información, el riesgo de invertir en actividades extractivas es alto.

El jurel y la caballa no están siendo encontrados en los volúmenes que antes existían, por lo que la industria de CHD está prestando más atención a la anchoveta; pero ¿qué ocurriría si la anchoveta se ausentase de las zonas de pesca tradicionales por efectos del cambio de temperatura?

La situación es tan evidentemente grave, que mezquinar recursos para investigación podría ser fatal para el sector pesquero.

La promoción del consumo humano de anchoveta y pota, mientras exista disponibilidad del recurso se convierte en un imperativo. Pero no solamente para aumentar el volumen de exportaciones. El sector tiene una gran deuda con la población peruana que requiere de alimentación, por lo cual los esfuerzos que el Estado viene realizando son adecuados.

Sin embargo el Estado no puede convertirse en un ente comercializador ni ser el eterno donador de pescado. El verdadero reto consiste en articular la labor de promoción y creación de mercado interno con el sector privado. Entendiendo que el sector privado no solamente es la gran industria sino también el sector artesanal, el cual tiene muchas posibilidades de ser alentado y apoyado para crear microempresas de transformación y comercialización que ocupen ese nicho de mercado.

En este escenario el DS 010-2010-PRODUCE que reglamenta el uso de la anchoveta para CHD debe ser revisado por las limitaciones que impone al desembarque de dicho recurso para el CHD en estado fresco.

La nueva administración de Pesquería y el próximo gobierno tienen un tema importante al cual deben prestar atención prioritaria: la investigación y el adecuado manejo de la anchoveta y la pota que permitan el crecimiento del consumo sin afectar a las biomasas actuales.

Cabe revisar la conveniencia de la mantener vigente el régimen de licencias de pesca para pota concedidas a embarcaciones de bandera extranjera mediante la RM 163-2010-PRODUCE.

La atención que requiere la investigación debe centrarse no solamente en los recursos económicos necesarios, sino en la apertura del ente científico que debe proporcionar información abierta a todos los agentes del sector.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

Información Oceanográfica

En lo que va de Setiembre la situación se ha tornado crítica para la pesquería del calamar gigante (pota), hay inversiones hechas en el norte que tienen como base este recurso y no se ha tenido ningún pronunciamiento de la autoridad del sector ni del organismo técnico - científico para ayudar a los empresarios en sus decisiones, lo mismo debe estar pasando con otras pesquerías.




Lea la nota haciendo click aqui

sábado, 11 de septiembre de 2010

EL RETO INMEDIATO EN EL SECTOR PESQUERO

A 10 meses de que termine este gobierno, una nueva autoridad de pesquería, que se espera asuma en los próximos días, tiene un reto singular. No hay tiempo para grandes cosas, para promesas, para ofertas, para experimentos, para aprender, ni sería adecuado utilizar lo que queda de esta gestión para saturar los medios de comunicación con fotos y discursos sobre cosas que ya serían imposibles de resolver en tan corto plazo.

Hay tres cosas fundamentales que este gobierno debiera enfrentar en estos últimos meses:

La primera es ejecutar al 100% el presupuesto de inversiones y de capacitación. Ambas partidas ofrecen pobres cifras de avance en su ejecución que son preocupantes.

La segunda es resolver los problemas existentes a nivel de conflictos entre normas promulgadas y los intereses del sector tratando de encontrar un consenso para soluciones intermedias.

La tercera es empezar el diseño de una política pesquera de largo plazo para beneficio del país, tendiendo lazos con todas las fuerzas políticas que intervendrán en la contienda electoral. Un acuerdo entre todos los candidatos podría generar un documento que sirva de base para que el nuevo gobierno encuentre una política ya diseñada en consenso que contenga un plan estratégico sectorial de largo plazo. De esta forma quien asuma el próximo gobierno habría ganado un tiempo valioso al punto de que sus primeras acciones de gobierno serían la implementación de una política y un plan ya estructurado y consensuado entre administrador, administrados y sociedad civil.

Los planes de gobierno de los candidatos podrían de esta forma incorporar para el sector pesca una propuesta coherente, técnica, realista y conveniente para la pesquería peruana.

El país se merece el esfuerzo para dar inicio a una gestión pesquera eficiente que conduzca realmente a disponer de pesquerías sostenibles y un futuro.

Un futuro que nos encuentre preparados para enfrentar el cambio climático, el agotamiento de las poblaciones de peces y la seguridad alimentaria de nuestra población, como principales objetivos estratégicos de largo plazo. Definir estas matrices es fundamental pues de ellas se derivan todas las acciones, políticas y objetivos que debe mencionar un plan estratégico como respuesta a una política de Estado.

La Ley General de Pesca fue promulgada con DECRETO LEY Nº 25977 del 7 de noviembre de 1992.

El Reglamento de dicha ley fue promulgado con DECRETO SUPREMO Nº 012-2001-PE del 13 de marzo del 2001.

Entre la ley y el reglamento pasaron 9 años.

Entre el primer reglamento y el día de hoy, el mismo ha sufrido infinidad de variaciones y modificaciones a tal punto que se ha convertido en una documento lleno de parches, confuso y complicado. Siendo que el reglamento se aprueba por decreto supremo, es fácil introducir constantemente cambios y modificaciones.

Eso indica dos cosas: Una es que la ley no es la más adecuada ni el reglamento original tampoco por cuanto ha requerido muchas variaciones; otra es que la facilidad con la que puede cambiarse el reglamento al no tener que pasar por el Congreso puede significar muchas cosas, entre ellas que no sean modificaciones estrictamente técnicas.

En todo caso, en 2011 tanto la ley como su reglamento y modificaciones serán demasiado antiguas y requieren un cambio.

El nuevo Congreso asumirá el reto de diseñar una nueva ley de pesca que minimice los riesgos de que el reglamento distorsione el espíritu de la ley.

La situación ideal es que la nueva ley recoja el espíritu de una Política de Estado y un Plan Estratégico trabajados en consenso con todas las fuerzas políticas, administrados y sociedad civil. Su aprobación sería más rápida, respondería a las reales necesidades de la pesquería peruana, y de hacerse en la primera legislatura, la autoridad de pesquería tendría las herramientas legales básicas para trabajar su implementación en forma técnica y no empírica ni improvisada.

Esto requerirá decisión y voluntad políticas y el mejor esfuerzo de los políticos por entender que la pesquería es un tema complejo que requiere la participación de muchas disciplinas, el consenso y sobre todo el conocimiento del sector.


viernes, 10 de septiembre de 2010

Retos y desafíos en capacitación, desarrollo tecnológico, investigación y aspectos sanitarios

RETOS Y DESAFIOS EN ASPECTOS NO TECNOLOGICOS Y EDUCATIVOS
- Restituir la autonomía del Centro de Entrenamiento Pesquero de Paita
- Poner especial énfasis en la educación e información para las poblaciones costeras y comunidades de pescadores a fin de que estas tomen conciencia de la realidad de la pesquería. De esta forma constituirán un defensa natural de su propio ecosistema y contra la desinformación proveniente de grupos o de medios que por desconocimiento o interés siempre pretenden anteponer intereses de parte sobre el interés colectivo.
- Brindar asistencia técnica a los pobladores costeros para reorientarse a actividades no extractivas. De tal manera se podrá impulsar su reconversión laboral o profesional o, en todo caso, dirigir sus actividades fuera del sector.
- Suspender temporalmente el dictado de cursos de formación de tripulaciones de embarcaciones pesqueras.
- Diseñar un Programa Nacional de Capacitación Pesquera que se convierta en el documento rector de todas las actividades educativas a cargo de todas las entidades del sector que tengan programas de capacitación y educación, que uniforme conceptos y distribuya racionalmente los recursos económicos destinados a la materia.
- Educar en los principales temas relacionados con el mar, con el concepto de ecosistema y protección del medio ambiente y hacerlo extensiva a todas las comunidades costeras.
- Cambiar la orientación de la actividad educativa, la cual debe dirigirse a capacitar al actual pescador a fin de perfeccionarlo en sus labores y orientarlo hacia aspectos relacionados con el procesamiento de sus productos y su comercialización. Implementar programas de capacitación técnica en manejo y administración de embarcaciones pesqueras e infraestructuras pesqueras artesanales. Los centros de formación existentes deben reorientar sus programas de capacitación hacia la especialización, actualización y capacitación en nuevas pesquerías y tecnologías para tripulantes y principalmente para desarrollar actividades de transformación y comercialización de anchoveta y pota.

RETOS Y DESAFIOS EN TRANSFERENCIA Y DESARROLLO TECNOLOGICO
- Consolidación de Estándares de Inocuidad, Calidad y Trazabilidad.
- Capacitación. Desarrollo y Transferencia de Tecnologías.

RETOS Y DESAFIOS EN ASPECTOS SANITARIOS Y DE MEDIO AMBIENTE
- Mejoramiento de la infraestructura de desembarque de la pesca destinada al consumo humano.
- Independizar al SANIPES del ITP dotándolo de autonomía administrativa.
- Actualizar el DS 040-2001-PE que dicta normas sanitarias en consenso con el sector privado.
- Articular con las autoridades competentes el control de las condiciones sanitarias de los productos hidrobiológicos que se expenden en los terminales pesqueros, mercados y supermercados.
- Certificar sanitariamente a todos los DPAs y embarcaciones pesqueras.
- Normar y controlar que las plantas de procesamiento, flota pesquera industrial y artesanal y desembarcaderos pesqueros reduzcan el vertido de contaminantes al mar, ríos y lagos a un 0%. De igual forma deberá actuarse sobre los contaminantes atmosféricos. Acciones que deben ser articuladas con el MINAM.
- Implementar mecanismos de control y sanción en coordinación con la DICAPI para la aplicación estricta de las disposiciones contenidas en el Marpol sobre normas para evitar la contaminación por residuos oleosos y basuras provenientes de las embarcaciones.
- Promover y normar que los motores de las embarcaciones sean reemplazados por aquellos con tecnología moderna que reduce la contaminación.
- Formulación de los LMPs correspondientes para la industria conservera, congeladora y de curados, así como para los DPAs, y Centros Acuícolas, exigir el cumplimento de los PAMAs, aplicando drásticas sanciones a su infracción.
- Mejorar el proceso de fiscalización y suspensión.
- Promover, difundir y capacitar en temas relacionados al cuidado del medio ambiente a todos los agentes involucrados

RETOS Y DESAFIOS EN INVESTIGACION PESQUERA
- Promover y propiciar la divulgación de conocimientos sobre la diversidad marina y costera, con énfasis en aquellas estrategias para promover la integración de la información para la toma de decisiones y la adopción de acciones tendientes a su conservación y uso sostenible.
- Asignar recursos económicos adecuados al ente científico para que pueda desarrollar un plan de investigación científica adecuado a las necesidades y urgencias del país.
- Desarrollar planes de manejo integrado de la zona costera, que anticipen y mitiguen los impactos de peligros y condiciones climáticas extremas, permitiendo a las comunidades costeras adaptarse y mitigar los efectos.
- Promover las capacidades nacionales enfocadas al uso de los recursos marinos en vías de sobreexplotación y asuntos costeros de riesgo, promoviendo un enfoque tanto nacional como regional, que incluya investigación, difusión y educación a través del gobierno, la ciudadanía y la comunidad académica.
- Recomendar una cuota de anchoveta que asegure la sostenibilidad de la pesquería en el corto, mediano y largo plazo pero que también permita la manutención de niveles poblacionalmente viables de las aves guaneras y especies predadoras.
- Aplicar el enfoque ecosistémico a las recomendaciones técnicas que emite a la autoridad administrativa.
- Aplicar el enfoque de precaución en las recomendaciones científicas para la determinación de las cuotas globales de captura.
- Analizar las implicaciones y consecuencias del calentamiento global y el cambio climático, determinando las posibles consecuencias sobre las poblaciones de peces y las zonas costeras. Presentar conclusiones y recomendaciones para el diseño de un plan estratégico que permita enfrentar esta contingencia climática en las mejores condiciones posibles.
- Realizar un estudio que conduzca al ordenamiento de las pesquerías actualmente no reguladas y sujetas a una intensa explotación que pone en riesgo su sostenibilidad.
- Permitir la actividad pesquera sólo si es razonable esperar que no genere impactos inaceptables.
- Modernizar las embarcaciones de investigación científica que posee el IMARPE.
- Construcción de instalaciones apropiadas para la reubicación de todos los laboratorios.

martes, 7 de septiembre de 2010

LA PESQUERIA NO ES SOLAMENTE CIENCIA BIOLOGIA Y DERECHO

Las críticas sobre el nivel de eficiencia que viene recibiendo el SANIPES, (Servicio de Sanidad Pesquera), evidencian un escenario kafkiano en la realidad de la pesquería nacional.

La falta de articulación entre sectores, así como la perversidad del sistema, generan un escenario incoherente entre la promoción de Tratados de Libre Comercio, y la capacidad operativa para facilitar precisamente la ejecución de exportaciones en el marco de los TLCs.

Que un exportador sufra el calvario administrativo que supone conseguir un certificado sanitario para exportar un producto hidrobiológico, como leemos en la nota del Presidente de la ONG Oannes, que mantiene un foro pesquero en internet y reproducido en el blog Mar Abierto y en el portal de la revista Pesca es preocupante.

Cuesta mucho esfuerzo lograr la confianza de los importadores. Durante mucho tiempo se ha exportado con carta de crédito, pero la carta de crédito es un sistema de pago que en el mejor de los casos se hace efectivo 45 días después de la exportación propiamente dicha, ya que los bancos (que son una burocracia) de acuerdo con las actuales normas de pagos de LC se fijan de manera estricta de forma tal que los documentos coincidan con lo requerido en la LC. Si esto no es así, comienzan las discrepancias que son más un negocio de bancos, agregado a su negocio de financiación pre embarque y post embarque. Adicionalmente de que le quitan seguridad al exportador, ya que una carta de crédito con discrepancias puede no honrarla el comprador si le viene en gana.

Los empresarios hacen un gran esfuerzo por ganarse la confianza del importador y a veces logran cambiar la modalidad de pago. Algunos importadores aceptan 30% de adelanto contra la factura proforma y 70% contra el BL y la factura comercial. Con lo cual el pago se hace efectivo a máximo 10 días después del embarque, solucionando un serio problema de flujo de caja. Luego del pago los exportadores completan los documentos incluyendo el certificado sanitario y los envían directamente al importador.

Pero ahora se ha creado una nueva situación de mercado generada por los muchos contenedores que han llegado a China sin tener certificado sanitario por una u otra razón, más el hecho de que dos grandes exportadores de productos congelados peruano han sido suspendidos por 90 días, por el CCIB, la autoridad sanitaria China. 14 compañías peruanas más serán supervisadas al milímetro por la autoridad china para prever problemas de TVBN, Salmonella, Vibrio Cholerae y Vibrio Parahemolyticus. Los importadores con quienes se había ganado la confianza comercial de pronto pago, ya no quieren pagar o que se les embarque, si la carga no cuenta primero con el certificado sanitario. Ellos saben que la carga tiene calidad sanitaria, la necesitan realmente debido a la escasez que hay de pota y nadie en China se explica porque el SANIPES no les da certificación.

Se está jugando con fuego con esta situación porque la principal exportación de consumo humano directo es el calamar gigante o pota y el principal mercado es el Chino.

Cada día que un contenedor está detenido en puerto chino sin ser desaduanado le cuesta al exportador US$100. Si este contenedor no ingresa a China y debe ser reexportado, debe sumarle además los costos de reembarque y flete. Pero la carga no se queda 10 días en puerto, llega a quedarse 30 o 40 días, porque la burocracia aduanera china es lentísima. Así que con eso cada exportador puede llegar a perder de US$15,000 a US$25,000 dólares por contenedor, por lo que dependiendo del valor de la carga, hablamos de entre el 50% y 90% de pérdida.

El origen de esto, expuesto en anteriores notas publicadas en la Revista Pesca y algunos blogs, es un sistema perverso que permite que los titulares de pliego en el sector pesquero puedan serlo sin conocer, no solo la realidad de la pesquería en sí, sino las necesidades y problemas del negocio pesquero. El divorcio entre el mundo académico, el mundo político y el mundo de los negocios pesqueros es tan surrealista, que, Kafka sería un escritor costumbrista si fuese peruano y escribiese sobre la materia.

La política, el paradigma y el dogma son inútiles y perversos si no facilitan el hacer negocios rentables, ágiles y a la velocidad de un mundo globalizado que camina por internet.

De nada le sirve al país tener Tratados de Libre Comercio si ello no genera negocios.

El objetivo de dichos tratados es incrementar el comercio con todos los beneficios colaterales que ello significa. Esas negociaciones son dirigidas por el Ministerio de Comercio Industria y Turismo. Sin embargo es evidente que otros ministerios, en este caso el pesquero, no están a la altura de las circunstancias. No lo están porque el sistema lo permite. Por tanto, los logros a nivel de firmas de tratados que se publicitan en los medios podrían no tener efectos prácticos positivos en el mundo de la realidad.

Tan igual como ocurre con la Ley de Promoción del atún que no fue aceptada ni reglamentada por el Ministerio de Economía y Finanzas y muchos de sus artículos no fueron más que una declaración lírica sin resultados evidentes.

Si no se hacen negocios no se genera empleo ni crecimiento. Desde el pescador artesanal hasta el industrial más grande viven de hacer negocios, necesitan hacer negocios. El país prospera y crece gracias a que se hacen negocios, no gracias los políticos. Los negocios generan los impuestos de los cuales se alimenta el sistema, y crea los empleos, que a su vez también generan impuestos. Por tanto, los políticos existen gracias a que hay impuestos, los que a su vez son creados por la existencia de negocios. El impuesto a la renta, el impuesto general a las ventas y el impuesto selectivo al consumo derivan de la existencia de negocios en la sociedad.

La pesquería no es solo ciencia, biología y derecho. Son caminos que llegan a una meta, la cual es hacer negocios. Solo un negocio rentable genera empleo, crecimiento y seguridad alimentaria.

El sistema peca de inexperiencia y de ignorancia. Gestionar poblaciones de peces es un arte y una ciencia que debe desembocar en un manejo empresarial que asegure pesquerías sustentables con todo lo que ello implica. No se llega a la titularidad del pliego para aprender, improvisar, experimentar ni satisfacer apetitos personales o egos individuales. Se llega para servir poniendo experiencia a disposición de la creación de consensos que, además de llevarnos a pesquerías sustentables, nos permitan tener negocios, empleo y seguridad alimentaria sustentables. Si eso fuese así, la Nación recibiría tributos, empleo y alimentación razonables.

La administración de la pesquería debe conjugar y equilibrar la sustentabilidad de los recursos pesqueros con la existencia y el crecimiento de las empresas que generan negocios y que finalmente hacen posible la existencia del sistema.

El sistema no se alimenta a sí mismo. Es la actividad pesquera artesanal e industrial la que alimenta al sistema. Por tanto, en una escala de valores moral, es el ciudadano, el empresario, quien realmente es el dueño de casa. No lo es el sistema, que actúa solo como el mayordomo que administra el patrimonio nacional.

Este silogismo implica que las necesidades del administrado son primarias y que la autoridad tiene que actuar en consenso con y en beneficio del administrado y no en su contra.


lunes, 6 de septiembre de 2010

Retos en la extracción, transformación y comercialización del sector pesquero

Promover el consumo de anchoveta y de pota, educar a la población a consumir estos productos es una función del Estado. Regalar anchoveta y pota a través de programas sociales es bueno en cierta medida, pero malo cuando la actividad se convierte en compra de corazones y de personas. No es bueno regalar pescado, sino enseñar a pescarlo.

El regalo compra votos y sonrisas y facilita salir en las fotos y en los medios; pero no resuelve problemas alimentarios en forma sostenida.

La seguridad alimentaria nacional no se conseguirá a través de programas de regalo de pescado, sino enseñando a la gente a ganar dinero. Es lo que unico que daría sostenibilidad al proyecto. Si el Estado realiza una labor eficaz educando y creando el hábito de consumo, lo que sigue es convencer e incentivar la creación de microempresas que ocupen ese nicho de mercado. Debe capacitarse y asesorarse al pescador, al poblador, al ciudadano que quiera aprender a mejorar la calidad en la extracción, transformar la pota o anchoveta, darle valor agregado, distribuirla y venderla. El efecto colateral es la creación de empleo y el mejoramiento nutricional de la población, en especial la de menores ingresos.

Programas como el que maneja el Centro de Entrenamiento Pesquero de Paita en convenio con la Agencia Japonesa de Cooperación Internacional, creado hace 4 años, es un modelo que evidencia éxito y debiera ser replicado y perfeccionado y no olvidado ni castigado. Eso requiere cierto nivel mínimo de conocimiento y entendimiento de la problemática. La empresa DIPIU de Piura es un ejemplo de lo expresado cuya experiencia debiera ser capitalizada en programas concretos que deben ser manejados por gente que conozca del tema en forma práctica.

Hace tiempo el Perú viene hablando de las posibilidades de la anchoveta para la alimentación humana, en especial la nacional. La gastronomía peruana está usando anchoveta y constituye parte del boom del momento: pero eso no implica generación de empleo ni incremento del índice de nutrición de la población de menores recursos. Es una moda focalizada en los sectores A, B.

Las latitas de anchoveta que se ven en los supermercados son un producto gourmet, que es caro. Una latita de 100 gramos convertido a kilos resulta S/.20 por kilo. Creer, o inducir a pensar que eso significa que el consumo de anchoveta está aumentando es una apreciación errada.

El verdadero incremento del consumo de anchoveta que tendría el doble efecto de generar empleo y contribuir significativamente en la reducción de la desnutrición en el país, radica en llevar la anchoveta a un consumo masivo en todos los lugares del país, en especial los de menores recursos. No es en Lima, en los supermercados ni en los restaurantes donde se apreciará este efecto, sino en los mercados populares, en las provincias, en los distritos, en la sierra del Perú.

La masificación del consumo de anchoveta empieza por programas estatales de creación del hábito de consumo mediante educación y degustación. El Estado debe crear mercados, hacer que la anchoveta constituya una oportunidad de negocio para el sector privado, para la creación de micro empresas.

El hecho es que hace años, y no a través de dispositivos recientes, que el Estado y PRODUCE manejan este tipo de programas con éxito gracias a la visión oportuna de Alfonso Miranda durante su gestión como viceministro de Pesquería. Falta solamente dar un pequeño paso articulándolos y estimulando la creación de microempresas.

El Ministerio de la Producción a través del Despacho Viceministerial de Pesquería, ha ejecutado diversos programas y acciones de promoción del consumo de pescado en general y particularmente de la anchoveta a fin de incrementar el consumo per cápita en la población peruana, preferentemente en los sectores pobres y en extrema pobreza de las zonas rurales, alto andinas, selva alta y zonas urbanas pobres. Sin embargo ha tenido poco éxito en la creación de mercados de consumo que atraigan inversionistas. Si el inversionista no encuentra un nicho de mercado para intervenir no hay forma de dar sostenibilidad al consumo de anchoveta y seguiremos en el círculo del asistencialismo del Estado que no genera empleo ni es sostenible.

RETOS Y DESAFIOS EN LA EXTRACCION DE PRODUCTOS HIDROBIOLOGICOS

- Aplicación de Nuevas Tecnologías y Equipamiento en la Pesca

- Buenas prácticas de manipulación, ajustadas a las normas de sanidad y calidad.

- Modernización de la Flota pesquera.

- Desarrollar y promover la idea de una pesquería sostenible mediante la aplicación de planes de gestión a largo plazo para las poblaciones de peces, basados en información científica sólida, que pondría fin al problema político y social sobre la pesca, sustituyéndolo por objetivos de capturas fijados dentro de límites biológicos y un esfuerzo pesquero adaptado a estos objetivos.

- Definir las tasas anuales de captura de todas las especies explotadas, incorporando a la evaluación para su determinación, la dinámica trófica, el análisis de la relación presa-predador y la naturaleza y cuantificación de sus respectivos requerimientos de ingesta. Activar mecanismos racionales, económicamente viables, que permitan una determinación adecuada de las cuotas de extracción.

- Diseñar estrategias para la sustentabilidad de los recursos hidrobiológicos, que pongan en práctica el Principio Precautorio.

- Diseñar normas atractivas para estimular la creación de una flota de arrastre de media agua (Especie objetivo el jurel y la caballa) y una flota cerquera palangrera (Especie objetivo los túnidos y la pota) de bandera nacional.

- Diseñar Reglamentos de Ordenamiento Pesquero para las principales pesquerías artesanales.

RETOS Y DESAFIOS EN LA COMERCIALIZACION DE PRODUCTOS HIDROBIOLOGICOS

- Incrementar y mejorar la atención al mercado interno.

- Crear los hábitos de consumo de anchoveta y productos hidrobiológicos tradicionales y nuevos; capacitar a los integrantes de la cadena productiva en las fases de extracción, transformación y comercialización. Crear mercados para estimular la aparición de microempresas orientadas a su comercialización. Incremento del consumo interno de anchoveta y pota.

- Estimular las inversiones en cadenas de frío

RETOS Y DESAFIOS EN LA INDUSTRIA DE LA TRANSFORMACION DE PRODUCTOS HIDROBIOLOGICOS

- Productos Pesqueros Normalizados Internacionalmente.

- Infraestructura Moderna

- Estandar Sanitario único para el mercado interno y mercado externo.

- Incremento de la producción de congelados, conservas y curados para el mercado interno.


domingo, 5 de septiembre de 2010

RETOS Y DESAFIOS DEL SECTOR PESQUERO

Se nos ha enseñado que la democracia es la mejor forma de gobierno; que es el pueblo quien elige a sus gobernantes para que ejerzan el poder en su nombre. La verdad es que se elige solo al Presidente y a los parlamentarios, quienes no ejercen la administración del país, sino que tienen otras funciones. Solo el Presidente administra para lo cual designa funcionarios. Estos últimos no son elegidos por el pueblo, pueden ser cualquiera. Es ahí donde el sistema no tiene mecanismos de control. No es suficiente la existencia de organismos de control o el mismo Congreso para que investiguen y sancionen hechos de corrupción ya consumados dentro del sistema legal. Existe un vacío que impide a la Sociedad establecer mecanismos que no solo sancionen hechos ocurridos, sino que prevean y eviten, no solo la corrupción sino la administración ineficiente, carente de metas de largo plazo, de coherencia y de consenso.

Aún en medio de un sistema de gobierno que es, a todas luces perverso desde el momento en que las autoridades elegidas tienen la facultad de designar autoridades de jerarquía inferior a las cuales se concede un poder absoluto sobre un sector de la economía nacional, es posible perfeccionarlo.

Todo sector, en este caso el pesquero, necesita de políticas de largo plazo, de continuidad, de objetivos y metas claras y de una visión de largo aliento. No disponer de ella implica que los planes de gobierno duran solo lo que el gobierno dura. El riesgo es mayor por cuanto la experiencia peruana muestra planes de gobierno pobres en contenido y otros que se publicitan pero no se ejecutan. El sistema permite que el candidato ofrezca algo que no tiene obligación de cumplir. Si lo cumple bien y si no no pasa nada. Dios y la Patria se lo reclamarán.

Ocurre que los peces, crustáceos y moluscos no reclaman y son los que sufren los impactos de la ausencia de políticas y planes. Y somos los pobladores los que recibimos las consecuencias viviendo en condiciones poco saludables debido a los impactos de la pesquería sobre el medio ambiente y no aprovechando los productos hidrobiológicos para una alimentación básica.

Por tanto la opción es formular políticas de largo plazo en consenso con todas las fuerzas políticas que deberán tener la madurez necesaria para entender que lo que debe hacerse no puede modificarse cada 5 años porque es lo que técnica, económica y socialmente es necesario.

Más grave aún es sufrir los impactos de cambios, inestabilidad y volatilidad en el manejo sectorial durante el período que dura un gobierno.

Los planes estratégicos y operativos diseñados para uno o dos o 5 años son irrelevantes en la medida que cada Titular de Pliego, haciendo uso de las facultades de poder absoluto que le han sido concedidas puede hacer caso omiso de ellos, cambiarlos o modificarlos.

La sociedad está obligada a elegir entre uno y otro candidato; pero no se le concede el derecho a la fiscalización real y oportuna de que se cumpla lo ofrecido en una campaña electoral. La Sociedad necesita disponer de un mecanismo que imponga a las fuerzas políticas a diseñar y aprobar en consenso una política de Estado de largo plazo que se obliguen a cumplir, para lo cual tienen que crearse mecanismos de control y de cumplimiento. De lo contrario el sistema político en el cual vivimos es una farsa, es un mecanismo para controlar a la sociedad y ejercer el poder sin más límites que leyes, decretos y resoluciones que pueden ser cambiadas en cualquier momento para legalizar acciones que no necesariamente puedan ser las más adecuadas.

El sistema encadena a la sociedad y la obliga a vivir y producir gobernada por políticos que pueden impunemente proclamar mentiras o incoherencias y que luego nos amenazan si fallamos en proporcionarles los medios para seguir produciendo y otorgándoles el poder de gobernarnos. Se espera de nosotros que continuemos obedeciendo, haciendo funcionar industrias, dirigiendo empresas y sepamos la manera exacta de hacerlas rentables, mientras las tribus de políticos y tecnócratas combaten entre ellos por una porción de poder y de figuración.

Salir en la foto, salir en los medios, hacer grandes anuncios, conseguir aplausos y votación por sonrisas, no es lo que la pesquería peruana necesita en medio de un cambio climático que se avecina cada vez con más fuerza y puede cambiar la actividad pesquera tal como la conocemos hoy.

Convencidos que las mágicas palabras que los medios publicitan tienen el poder de alterar la realidad, creen que hacen todo lo correcto cuando puede ocurrir, ante la ausencia de planes y políticas, que no sepan que no saben.

Mientras los hombres hundidos en el salvajismo no poseyeron concepto de la realidad objetiva y creyeron que la naturaleza física estaba gobernada por el capricho de demonios desconocidos, no fueron posibles pensamientos, ni ciencia, ni producción ni planificación. Solo cuando el hombre descubrió que la planificación y la previsión eran algo firme, previsible y definitivo, pudo basarse en sus conocimientos, escoger su curso, planear su futuro y, lentamente, emerger de la caverna. En nuestros días, han colocado a la industria y al sector pesquero, por su inmensa complejidad de precisión científica, en poder de demonios desconocidos, bajo el imprevisible poderío de los caprichos arbitrarios de ocultos y grotescos tecnócratas, a veces sin la experiencia mínima del sector que administran.

Un pescador no realizará el esfuerzo de toda una faena si no puede calcular las posibilidades de su captura. En cambio, los tecnócratas y burócratas, en ausencia de planes consensuados de largo plazo, esperan que los responsables de la extracción, de la industria y del comercio que planean técnicamente porque conocen su negocio, continúen funcionando y produciendo, sin saber qué capricho de qué funcionario, que ignora la complejidad del negocio, se abatirá sobre él para demoler en un momento la totalidad de sus esfuerzos.

Los que marchan a la deriva viven y planean al día. Cuanto mejor es una mente, más amplio su alcance. Un hombre cuya visión se extienda tan solo a una choza, continuará construyendo sobre arenas movedizas, para conseguir un rápido producto y trasladarse a otro lugar. Quien planea rascacielos, no obrará de ese modo. Ni pasará cinco años de absoluta devoción a la tarea de diseñar una empresa, si grupos de seres inexpertos están manipulando leyes y normas contra él para restringir sus actos y obligarle a funcionar en medio de incoherencias y ausencia de planes integrales.

RETOS Y DESAFIOS EN ASPECTOS DE GOBERNABILIDAD

- Diseño de una Política Pesquera de largo plazo.

- Creación del Consejo Nacional de Pesca para que administre el sector en base a consensos derivados de planeamiento técnico, comercial y social adecuados, limitando la tentación del absolutismo que es facultad de los titulares de pliego.

- Revalorar al funcionario público otorgándole niveles adecuados de remuneración, un sistema de ascensos y estímulos que levanten su moral, así como la posibilidad de que los mejores accedan a las direcciones que conocen mejor que ningún funcionario de confianza, que puede no tener más méritos que gozar de cierto nivel de confianza y grados académicos inadecuados para el cargo.

- Fortalecimiento de las capacidades de los recursos humanos del PRODUCE y Organismos Públicos.

- Gestionar la tipificación y calificación de ciertas infracciones pesqueras como delito y penalizar a los infractores materiales e intelectuales. Gestionar que se faculte a la autoridad de pesquería al decomiso de naves y aparejos y su destrucción.

- Hacer cumplir las disposiciones legales vigentes que conducen a detener la construcción de embarcaciones destinadas a capturas de recursos plenamente explotados, sobreexplotados o en proceso de recuperación.

- Sistematizar y simplificar los procedimientos administrativos.

- Perfeccionar el sistema de cobranza de los derechos de pesca. Se evidencia que el PRODUCE no tiene un sistema de cobranza adecuado de los derechos de pesca puesto que el armador está obligado a presentar una declaración jurada mensual y a depositar en una cuenta de PRODUCE lo que debe pagar.

- Estudiar fuentes alternativas de financiamiento para soportar los costos de una investigación científica adecuada.

- Realizar un censo de pescadores y embarcaciones pesqueras artesanales que permita conocer con precisión el número y características de los administrados.

- Implementación de un Sistema Integrado de Gestión Computarizado al interior del Ministerio que genere agilidad y eficiencia en la adminsitración.

- Implementar un sistema de recolección de datos detallado al nivel de la actividad artesanal que permita presentar estadísticas precisas, en tiempo real y con una sola base de datos que integre la información procedente de todos los niveles sectoriales en un solo documento oficial. Mejorar, optimizar y publicar oportunamente la información estadística oficial del sector incorporando información precisa y detallada de los desembarques provenientes de la flota artesanal.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

INCREMENTO DE LA CAPACIDAD DE GASTO PUBLICO EN EL SECTOR PESQUERO

El diario La Primera, en su edición del 31 de agosto comenta sobre las transferencias de recursos pre-supuestales.

Al final de la nota presentamos algunos de los cuadros de ejecución presupuestal tomados de la Consulta Amigable del SIAF del Portal del MEF. Las cifras son aritméticamente evidentes. La pregunta de Juan José Marthans es válida entonces. ¿Cuál es el criterio para autorizar incrementos presupuestales cuando se evidencia que lo ya asignado en el Presupuesto Inicial Modificado tiene retrasos en la ejecución?
 
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