La debida gestión pesquera

El mayor fallo de la gestión es que ni los pescadores ni los gestores poseen los conocimientos necesarios para dirigir algo tan complejo como un ecosistema marino costero. El derecho a pescar no se debería basar en si uno dispone del dinero suficiente para comprarse un barco, sino en los conocimientos y la voluntad de trabajar en colaboración con los gestores y los científicos para hacer que la pesca sea sostenible. El derecho a pescar se debería ganar o perder según la voluntad de aceptar unos límites razonables a las capturas. Paul Greenberg

REVISTA PESCA

La Revista Pesca es un medio de información alternativo que presenta artículos, opiniones y noticias referidas a la pesca en el Perú y el mundo, con énfasis en la política pesquera, la sostenibilidad de los recursos pesqueros y la seguridad alimentaria. En este blog se publican notas de importancia, así como novedades del sector pesquero.

En 2023 cumplimos 64 años de publicación en el Perú.

Las ediciones a partir del 2010 se publican en formato digital (PDF) en la siguiente página web: http://www.issuu.com/revistapesca/docs


Merecemos una gestión de la pesca con visión de país y compromiso con el ciudadano.

Los peces del Perú, primero para los peruanos


miércoles, 23 de septiembre de 2015

AUN ES INSUFICIENTE PARA DETENER LA CONTAMINACION MARINA EN CHIMBOTE

“Las empresas pesqueras son sindicadas como las principales responsables de la destrucción de la fauna pesquera en la bahía de Chimbote, ello como consecuencia de la descabellada y criminal actitud de convertirla en su sumidero industrial al arrojar a las aguas marinas miles y millones de efluentes que son evacuados tras su proceso productivo de fabricación de harina y aceite de pescado.

Esta actividad la han realizado de manera impune a lo largo de décadas y terminaron por destruir lo que era una hermosa playa de carácter turístico hasta antes de la década del 60, razón por la cual la ley determinó que deberían cesar estas actividades y emplazó a las pesqueras a implementar sistemas de tratamiento de efluentes y de evacuación industrial de aquellos que los lleven varios kilómetros mar afuera, lo cual solo se puede conseguir a través de un emisor submarino.

Después de muchos años, después de habérseles otorgado reiterados plazos y de las maniobras de las grandes corporaciones a través de lobbys en el otrora Ministerio de Pesquería, hoy convertido en Ministerio de la Producción, ha llegado el momento de implementar los apremios y apercibimientos de la ley para exigir a los empresarios que se adecuen al procedimiento de tratamiento y eliminación de sus efluentes.

Los plazos se vencieron en diciembre pasado, para los empresarios se prolongó hasta el 28 de abril gracias a una interpretación que ellos mismos hicieron y finalmente no cumplieron, por ello es que desde hace varios meses la ciudadanía y las organizaciones ambientalistas vienen exigiendo a las autoridades que de una buena vez apliquen la ley y no sigan permitiendo que el mar de Chimbote siga siendo el desagüé industrial de estas plantas industriales que albergan una de las actividad más lucrativas del país.

Por ello es que no ha sorprendido a muchos que los representantes de la Municipalidad, la OEFA, la Capitanía de Puerto y la Policía Ecológica, pongan en marcha un operativo madrugador para clausurar los buzones artesanales y clandestinos, así como las pozas de recuperación de aceites que tienen estas plantes pesqueras a lo largo de la orilla de la playa del sector industrial del 27 de octubre.

Fueron 65 de estos buzones y pozas los que se clausuraron arrojando sobre ellos toneladas de concreto para impedir que se sigan lanzando al mar los desechos industriales de las plantas pesqueras, así como para se acumulen los restos de aceite de pescado que se recupera al aire libre, lo que convierte toda esta zona en lugares nauseabundos y pestilentes que perjudican a los vecinos de pueblos aledaños en la medida que estos atraen moscas, insectos, roedores y una criminal contaminación ambiental.

Posteriormente, la Gerencia de salud ambiental de la comuna provincial, que encabezó el operativo inicial, retornó al lugar y clausuró otras 18 instalaciones clandestinas de este mismo tipo para consolidar el trabajo que forma parte de las acciones que han emprendido las autoridades para exigir a las plantas pesqueras que se sumen al emisor submarino que, según se ha dicho, ya se encuentra en funcionamiento.

Esta es la otra parte de este álgido problema que nadie entendía por qué se permitían tantas concesiones y licencias a las empresas pesqueras, pues fue un numeroso grupo de ellas las que promovieron la construcción del emisor submarino a través de la entidad conocida como Aproferrol, la misma que recaudó las iniciales aportaciones de las empresas pesqueras y adquirió los materiales así como contrató a la empresa encargada de instalar el ansiado emisor.

Lamentablemente, como ya es de dominio púbico, la diferencias al interior de este organismo, impidieron que los trabajos concluyan en los plazos que estaban dentro de los que había autorizado el Ministerio de la Producción, sin embargo, ante la necesidad de adecuarse a la ley antes de ser sancionados, algunos empresarios promovieron la finalización de los trabajos de tal suerte que la gerencia de Aproferrol ha comunicado que el emisor submarino ya se encuentra en funcionamiento a pesar que no ha revelado cuantas empresas se han adherido a este sistema ideal para la evacuación de sus efluentes industriales.

Sea como fuera, no había razón alguna para que seguir permitiendo que las empresas pesqueras sigan arrojando sus efluentes al mar, estos buzones son en realidad una suerte de canaletas que llevan los desechos industriales directamente a la bahía, allí mismo se ubican las pozas de recuperación de aceite de pescado, una suerte de colador que en el sector pesquero se le conoce como borra y finalmente se traslada a las plantas de refinación de este producto para su posterior comercialización, empero, en el lugar, es decir, en la cabecera de playa se deja una verdadera inmundicia.

Con esta medida la Municipalidad como las autoridades ambientales están advirtiendo a los empresarios que ya no pueden seguir arrojando sus efluentes al mar y que, de acuerdo al PACPE, deben evacuarlos previo tratamiento en las plantas que ya deben haber instalado en sus centros fabriles y arrojarlos por el emisor submarino.

Sin embargo, se desconoce hasta la fecha cuantas pesqueras se han adecuado a este sistema de evacuación industrial, la fractura registrada al interior de Aproferrol no ha permitido que los medios de comunicación tengan acceso a mayor información y hasta donde se recuerda el Grupo Técnico Supervisor del PACPE no se ha vuelto a reunir en nuestra ciudad a pesar que se encuentra pendiente este tema de infracción de las plantas industriales.

Es evidente que el propósito de las autoridades es detener, de una buena vez, la impresionante contaminación que siguen promoviendo las empresas pesqueras, lo que no se llega a entender son los motivos por los cuales no aplican la norma que castiga a los malos empresarios con la cancelación de la licencia de operaciones en caso se mantengan rebeldes al nuevo sistema de evacuación industrial.

Creemos que ha llegado el momento de emplazar a los empresarios del sector pesquero, estamos casi seguros que a pesar que les han clausurado los buzones y las pozas de recuperación encontrarán otra manera ilegal y barata de seguir lanzando sus desechos al mar, de allí que aun cuando ha sido encomiable el accionar de las autoridades ambientales es aún insuficiente, si no ejecutan los apercibimientos será difícil que se consiga algo efectivo en este tema. Esperemos que ya pisen el acelerador”

Fuente
http://www.diariodechimbote.com/portada/editorial/82682-editorial--aun-es-insuficiente-