La debida gestión pesquera

El mayor fallo de la gestión es que ni los pescadores ni los gestores poseen los conocimientos necesarios para dirigir algo tan complejo como un ecosistema marino costero. El derecho a pescar no se debería basar en si uno dispone del dinero suficiente para comprarse un barco, sino en los conocimientos y la voluntad de trabajar en colaboración con los gestores y los científicos para hacer que la pesca sea sostenible. El derecho a pescar se debería ganar o perder según la voluntad de aceptar unos límites razonables a las capturas. Paul Greenberg

REVISTA PESCA

La Revista Pesca es un medio de información alternativo que presenta artículos, opiniones y noticias referidas a la pesca en el Perú y el mundo, con énfasis en la política pesquera, la sostenibilidad de los recursos pesqueros y la seguridad alimentaria. En este blog se publican notas de importancia, así como novedades del sector pesquero.

En 2023 cumplimos 64 años de publicación en el Perú.

Las ediciones a partir del 2010 se publican en formato digital (PDF) en la siguiente página web: http://www.issuu.com/revistapesca/docs


Merecemos una gestión de la pesca con visión de país y compromiso con el ciudadano.

Los peces del Perú, primero para los peruanos


domingo, 13 de noviembre de 2022

El consumo per cápita de pescado en el Perú

 

El Anuario Estadístico Pesquero y Acuícola 2020 muestras dos cifras diferentes para el consumo per cápita de pescado:

En la página 23 se lee: Según la ENAHO (2020) (Encuesta Nacional de Hogares que publica el INEI), el consumo per cápita de pescado en el país fue de 17.28 kilogramos por habitante.

Sin embargo, en la página 91 se observa un cuadro que indica que en 2020 el consumo pér cápita de recursos hidrobiológicos es de 27.4

Un mismo documento oficial muestra dos cifras diferentes, porque se toman con metodologías diferentes. En este contexto, ¿Cuál es la cifra oficial que debe tomarse como consumo per cápita de pescado? El mismo anuario publicado por el Ministerio de la Producción muestra dos cifras diferentes sin mayores notas o comentarios que permitan al lector saber cuál es que debe usarse.

El Programa A Comer Pescado, analiza su accionar utilizando la cifra de la ENAHO.

Entonces, ocurre que no se sabe con precisión cuál es la cifra que debe usarse en forma oficial.



sábado, 5 de noviembre de 2022

EL SECTOR PESQUERO EN EL PERU

 

Durante décadas, se nos ha dicho a los peruanos que somos buenos y bacanes porque exportamos mucha harina de pescado y muchos productos hidrobiológicos. Sin mayor información complementaria y sin mayor análisis por parte de la ciudadanía, se ha creado el cliché de que el volumen de exportaciones es bueno para el país.

La verdad es que toda la información es sesgada e incompleta y no muestra la verdadera situación.

Por un lado, la información estadística oficial de la autoridad de pesca incompleta y demora dos años en publicarse. Cuando se hace, solo muestra cifras de desembarque, producción y exportaciones, así como algo de las ventas al mercado nacional.

De esta manera, los peruanos creen cosas que no son del todo cierto; creamos un mito y nos mantenemos al margen de lo demás. Por otro lado, a muy poca gente le importa lo que pase con la pesca. La mayor parte de ciudadanos vive a espaldas del mar. Somos una ciudadanía indiferente y pasiva que prefiere la comodidad de la ignorancia, lo que nos ahorra el esfuerzo intelectual de analizar las cosas en su verdadera dimensión.

Lo cierto es que la información completa, que muestra la realidad del sector pesquero, no se publica.

Hay que entender que los recursos hidrobiológicos que el sector explota, son patrimonio de todos los peruanos. El Estado otorga permisos para que algunos usufructúen de los mismos, pero es justo y necesario que la Nación participe de la bonanza que genera.

La información de ventas y producción es insuficiente, porque no muestra lo que gana el pais. Muestra a un grupo de empresas y/o personas que hacen dinero con un recurso natural, pero nada más.

Lo que el Estado, en especial uno que dice gobernar para el pueblo debe mostrar, es toda la información estadística completa:

Volúmenes de exportación, desembarques, de capturas y de procesamiento.

Para saber qué es lo que ganamos con eso, se requiere conocer:

Impuesto a la renta de tercera categoría aportado por la industria pesquera. Quiénes, cuánto y qué especies han pagado derechos de pesca. Quiénes no han pagado la deuda y/o mantienen por este concepto.

Cuánto IGV se le ha devuelto al sector por efecto de sus exportaciones y cuánto se le dio a las empresas por concepto de drawback.

Cuánto empleo formal e informal, directo e indirecto genera el sector y de que calidad es el mismo.

Cuánto se ha generado por canon pesquero, cómo se ha repartido a los gobiernos locales y regionales y en qué se han gastado.

Finalmente, cuánto pescado se ha vendido en el territorio nacional y cuánto se ha servido para mitigar el hambre y la anemia en el país.

Si solo nos quedamos con las exportaciones y los desembarques, no estamos conociendo la historia completa ni comprendiendo debidamente la situación de la pesquería peruana.

Se necesita conocer hechos, cifras oficiales completas y evaluarlas para que cada ciudadano pueda formarse una opinión propia.

La riqueza infinita del mar peruano no es más que un mito. Este error de percepción promueve un incremento irrefrenable del esfuerzo pesquero y confunde además a la opinión pública haciendo más ardua la labor de regulación. Los beneficios económicos del sector pesquero marítimo alcanzarán una fracción mínima de la población costera involucrada. El mar peruano fue muy rico y abundante para la pesca, hoy ya no lo es.

La ausencia de información, de análisis, y la indiferencia de la gente, confirma el mito pesquero peruano que nos mantiene mal informados desde hace décadas.

Ocurre que la pesca en el Perú no solamente es poco conocida, sino que también sufre de la falta de interés por parte de los medios de comunicación y de la propia población. Creemos que somos buenos porque somos los primeros exportadores mundiales de harina de pescado. 

El desconocimiento del sector pesquero es compartido por la prensa y por la propia sociedad, por tanto, ambos resultan indolentes al problema. Eventualmente, esta ignorancia también es compartida por funcionarios que son designados sin mayor experiencia ni conocimiento de la problemática pesquera; sin agenda, sin planes, sin ideas, sin políticas y sin rumbo.

Hace años que el sector es entregado por los gobiernos de turno a autoridades que desconocen el sector. Por lo tanto, carecen de ideas, planes o programas. Se concentran en satisfacer intereses de parte, la devolución de favores, así como a quedarse en el cargo lo más posible. Algunos se han rodeado de gente idónea, a la que nunca escucharon, otros lo hicieron con amigos sin mayor capacidad de aporte a la pesquería. Esta es la historia de la pesca, para mal de la sostenibilidad del ecosistema y de la alimentación nacional

La pesquería debe ser una actividad que genere empleo digno, que genere utilidades razonables a las empresas; que provea de alimentación, prioritariamente a la Nación y secundariamente al resto del mundo; que contribuya equitativamente con el Estado a través de una justa participación en la renta de la empresa pesquera; que respete el medio ambiente y que garantice la sostenibilidad de los ecosistemas marítimos, lacustres y fluviales del país.



jueves, 3 de noviembre de 2022

EL ANUARIO ESTADISTICO DE PESCA Y LOS DERECHOS DE PESCA

 

La nota periodística que aparece en el siguiente enlace es bastante habitual y muy difundida, haciéndonos sentir que todo va bien, que la pesca en el Perú está bien y que somos bacanes porque exportamos mucho

https://larepublica.pe/economia/2022/11/02/produce-desembarques-totales-crecieron-mas-de-16-en-septiembre-pesca/?fbclid=IwAR1lEvfkJQNUMqLS_ZmgPEgFeqRXzha0hSwEIwh8MivPklRY5e1letwlKBw

¿Cómo  es que, saliendo información frecuente sobre exportaciones y desembarques del sector pesquero, aun no se publique el anuario estadístico del 2021?

La Oficina de Estudios Económicos del PRODUCE cuenta con personal altamente capaz, eficiente y responsable. Por tanto, es una incógnita a que obedece esta demora, lo cual debería ser una tarea pendiente para alguna administración.

Un documento oficial sobre la estadística pesquera, como es el mencionado anuario, si se publica con dos años de retraso pierde valor de análisis y uso inmediato. Se convierte tan solo en un documento histórico.

Por otro lado, no consigna información sobre los derechos de pesca. No informa, y ​​​​nadie lo hace, sobre el monto de la recaudación de los derechos de pesca. No se sabe cuánto se cobró, quién pagó, quién no pagó, quién debe y desde cuándo, ni a qué especies corresponden.

Obviamente tampoco dice, ni se sabe, en qué se gastó ese dinero directamente recaudado por PRODUCE.

La estructuración del canon pesquero, se hace sobre la incorporación del 50% de los derechos de pesca recaudados y del 50% del impuesto a la renta de tercera categoría del sector.

El otro 50% permanece a disposición de Produce. La utilización de este porcentaje no es pública, no se difunde ni se cuelga en el respectivo Portal de Transparencia del Ministerio de la Producción, que es el ente recaudador, por lo menos hasta ahora.

La distribución del canon pesquero sí se difunde a través del Portal de Transparencia Económica del Ministerio de Economía de Finanzas.

En el primer caso, el canon pesquero se distribuye entre los gobiernos locales y regionales en base a índices elaborados anualmente por el Ministerio de Economía y Finanzas, dato que se puede ver en el portal del MEF. Lo que no se puede saber es qué es lo que hacen las entidades receptoras con ese dinero. También se puede saber que la repartición es tan deficiente, que hay municipios que reciben menos de cincuenta soles, como se puede apreciar en la misma página web del MEF.  

En el segundo caso, no se puede saber lo que PRODUCE hace con el 50% de los derechos que recauda y si se está cumpliendo con la normatividad vigente por cuanto no se publica información ni rendición de cuentas.

Una forma de deducir cuánto se recauda por derechos de pesca en general, es decir de todos los recursos hidrobiológicos sujetos a dicho pago, es analizando las transferencias del canon pesquero. Este canon sí tiene una fuente abierta de información en la página web del Ministerio de Economía y Finanzas.

Las cifras pueden apreciarse en la página 55 de la edición de abril de la revista Pesca de 2018, que no se volvió a actualizar dado que a muy poca gente le interesa el tema. Por otro lado la situación no ha cambiado al 2022.

La página 4 muestra una data histórica desde 1998.

Las cifras transferidas en 2017 también pueden apreciarse en la mencionada edición.

https://www.yumpu.com/es/document/view/59923309/revista-pesca-abril-2018

Transferir estas irrisorias cantidades de dinero a un gobierno local resulta absurdo y hasta ofensivo, no solo por la ridícula cifra sino porque demuestra que ninguno de los funcionarios que interviene en el proceso evalúa la situación ni toma acción correctiva o fórmula recomendada efectiva alguna.


Hablando de datos estadísticos, el Anuario Estadístico Pesquero y Acuícola 2020 muestra dos cifras diferentes para el consumo per cápita de pescado:

En la página 23 se lee: Según la ENAHO (2020), el consumo per cápita de pescado en el país fue de 17,28 kilogramos por habitante .

En la página 91 se observa un cuadro que indica que en 2020 el consumo per cápita de recursos hidrobiológicos es de 27.4

¿Cuál es la cifra oficial que debe tomarse como consumo per cápita de pescado? 

Si se trata de analizar y evaluar datos de pesca ¿no debería haber una sola cifra oficial que cualquier analista pueda utilizar sin entrar en contradicción?

El mismo anuario publicado por el Ministerio de la Producción muestra dos cifras diferentes sin mayores notas o comentarios que permitan al lector saber cuál es la que debe usar.